Un Poco De 1984: Biometría Usada En Argentina Hoy

Hace un tiempo atrás, hubo un artículo aquí que mencionó la base de datos de ADN más grande del mundo. Bueno, no se si es la más grande, pero algunos países se acercan peligrosamente.

Cuando leí y traduje es artículo, inmediatamente pensé en lo que pasó y está pasando en mi país, Argentina. Estaba a punto de comenzar mis vacaciones en Europa y pensé que ese viaje en particular iba a ayudarme a escribir esto. No estaba equivocado.

Los argentinos estamos familiarizados con los datos biométricos. Uno de los sistemas de registro de huellas digitales que existen fue inventado en Buenos Aires y usado como herramienta durante las dictaduras militares que el país sufrió (particularmente durante la última). De hecho, gracias a una ley sancionada durante una de estas dictaduras, todo ciudadano debe tener un documento de identidad expedido por el gobierno, consistente de su nombre, apellido, dirección, fecha de nacimiento, sexo, huella digital y foto.

Ya sea porque, como cultura, nos tomamos el derecho a una identidad muy en serio (miles de personas “desaparecieron” durante la última dictadura), o por la razón que sea, a través de los años hemos llegado a ver esto como parte de nuestra sociedad, para bien o para mal. Además, ni el gobierno, las fuerzas policiales, el ejército, ni cualquier otra organización, pública o privada, intentó expandir su alcance en este campo por intereses “genuinos” o propios. Hasta ahora.

Documentado en conjunto en un gran artículo por la EFF y Fundación Vía Libre (si no has leído esos artículos, por favor hazlo. Ellos hacen un mejor trabajo que yo contando esto), los recientes avances del gobierno en este campo son atroces, como mínimo. Originalmente, a nadie le importaba tu huella digital (y tu fotografía ni siquiera era digitalizada), a menos que fueras un criminal (sospechoso o culpable). Pero gracias a un decreto ejecutivo expedido a fines del año pasado, eso ya está cambiando (sí, un decreto ejecutivo, algo que ni siquiera tuvo revisión parlamentaria. Sin entrar en sensacionalismos, algo acorde a una dictadura).

En noviembre de 2011 se creó el Sistema Federal de Identificación Biométrica para la Seguridad. Tan miedoso como su nombre suena, la realidad es aún peor. Básicamente, esto no sólo significa que la Policía Federal tiene ahora acceso completo a la base de datos del Registro Nacional de las Personas y viceversa. A eso deberías agregarle el hecho de que los nuevos documentos y pasaportes son digitalizados, o sea que tu huella digital es guardada en una base de datos sólo por el hecho de que tienes dedos (una base de datos muy atractiva para los ladrones de identidad, por cierto). Además, los datos biométricos de todos los bebés nacidos a partir del 1 de enero de 2012 en adelante, son digitalizados y guardados. Por supuesto, a medida que los pasaportes expiran, nuevos pasaportes digitalizados son expedidos, así que si naciste antes de 2012 tu única esperanza de no tener tus datos biométricos registrados es nunca saliendo del país (en realidad, cuando cumples 16 años eres forzado a renovar tu documento, así que técnicamente deberías haber nacido antes de 1996).

Si aún no estás asustado, está la segunda parte: para qué puede usarse esto. He dicho antes que mi viaje me ayudaría a escribir esto. Hubo una situación en particular donde esto se vio reflejado. Mientras me hospedaba en San Sebastián, el encargado del hotel (quien creo que era de EEUU) me preguntó:

Encargado: ¿Argentina? ¿No es ese el país donde no puedes comprar dólares, sólo si viajas fuera del país? (nota: en realidad es cualquier tipo de moneda extranjera, no sólo dólares)
Yo: *avergonzado* Sí…
Encargado: ¿Y es verdad que tienes que devolver esos dólares si no viajas?
Yo: *terriblemente avergonzado* Sí…
Encargado: ¿Pero cómo saben si no viajaste?

Mientras le contaba acerca de este nuevo sistema biométrico y de cómo fue implementado en todos los aeropuertos internacionales (o sea, no importa si eres extranjero o no, tu huella digital y tu foto son tomadas cuando sales y/o entras del/al país), sus ojos se agrandaron más y más. Ni siquiera llegué a decirle que la información del aeropuerto es enviada a la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) para ser cruzada con las solicitudes de la gente que pidió moneda extranjera. Todo lo que llegó a decir es cuán miedoso todo esto era, y estuvimos de acuerdo en que es, en verdad, una pesadilla Orwelliana hecha realidad.

Entonces, ese es sólo uno de los usos que el gobierno ha encontrado, en poco menos de un año. Me estremezco al pensar sobre para qué otras cosas podrían estar usando (o usarán) esa información. Y a pesar de expresas (y no oídas) quejas de parte de ONGs y del Partido Pirata local (en formación), me pregunto: este sistema, implementado en el nombre de la seguridad nacional, ¿podrá evitar en algún momento que ocurran cosas como estas?

Discussion

  1. octopus

    No veo la razón para el agrandamiento de los ojos del susodicho, ya que cuando entrás a EEUU te fotografían y te digitalizan las huellas de los 10 dedos.

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